con la tarde,
sentados junto al aire
que nos mira
y la lluvia hilvana
en nuestras manos
las respuestas
(que nos llegan turbias
-y nos mojan-
pero suenan bien)
Silvia Rodríguez Ares
25/5/2011
¡Hola, amigos! Soy Silvia Rodríguez Ares. Los invito a entrar en mi mundo de poesía. Bienvenidos.
con la tarde,
sentados junto al aire
que nos mira
y la lluvia hilvana
en nuestras manos
las respuestas
(que nos llegan turbias
-y nos mojan-
pero suenan bien)
Silvia Rodríguez Ares
25/5/2011
en este doble espejo.
El reloj insiste
en propagar el humo.
No recuerdo
si el incendio fue en mis manos
o en mis ojos.
Una voz me duele.
Tiene gusto a sombra
calcinada.
Silvia Rodríguez Ares
24/5/2011
esta palanca etérea
va desde el extremo de la boca
hasta la punta de los dedos
vuelve y -cada noche-
nos cambia la piel
Silvia Rodríguez Ares
23/5/2011
del desierto
se hunde entre la arena
el picaporte
empujo
y tras la puerta se derrama
otro vaso de la sed
Silvia Rodríguez Ares
23/5/2011
el sonido azul
del cielo
se oyen los plumajes
lastimados
dentro del cairel
Silvia Rodríguez Ares
23/5/2011
de tu espacio
-siempre reina el aire
en este fuego-
vi en tus ojos
una esquirla de oro,
un cometa transhumante
que se arroja en brazos
de la hierba,
un solsticio ingenuo
una luz inalterable
que me hace girar
Silvia Rodríguez Ares
22/5/2011
en la sombra,
guarda tu mirada
en el bolsillo
y tras el viento
que atempera
los llamados
de la noche eterna
corre hasta
la orilla
(Dicen que el naufragio
es el insomnio
de las olas.
Va en un barco
muerto,
desvelando al mar)
Silvia Rodríguez Ares
22/5/2011
que pende de un extremo
de la lluvia
se desangra
son las gotas muy brillantes
y la tarde absorbe
con fruición
esta agonía
de su boca emerge
un tulipán de fuego
y en su vientre -apenas-
va muriendo el sol.
Silvia Rodríguez Ares
22/5/2011
arrecia los soplidos.
En un gesto,
en el resquicio de una huella.
Deja una raíz,
un hilo roto,
un antifaz sin dueño
y aquel barco de papel.
Bebe su licor amargo.
Se sienta a esperar.
Silvia Rodríguez Ares
19/5/2011
en este sol
acaso estemos plenos
de locura
mi corona de diamantes
luce bajo el brillo
de tu cielo rojo
-nunca vi un jardín
de fuego
ni los ojos calcinados
de una flor-
Silvia Rodríguez Ares
18/5/2011
caminamos juntos
sin saber que cada espejo
que nos da la espalda
siempre nos tapa la luz.
Silvia Rodríguez Ares
18/5/2011
de todo
y crece un árbol
nuevo
con las ramas
que podé.
Silvia Rodríguez Ares
18/5/2011
no hay músculo que iguale
la velocidad del viento.
Cuelgo la mirada
de un farol,
ensayo una pirueta larga.
Hacia abajo vuelvo
y -en el aire-
siempre quedo atrás.
Silvia Rodríguez Ares
17/5/2011
para disipar la bruma.
Hay un hueco en el otoño
en donde crece el verde.
Hoy lo descubrieron las palomas
y volaron alto
para verlo azul.
Silvia Rodríguez Ares
17/5/2011
y el cielo se perdió en el aire.
Era condición de la bandada
atravesar el horizonte
y que la noche fuera larga.
(Dentro de la niebla
no hay un punto cierto
que limite el confín.)
Silvia Rodríguez Ares
16/5/2011