la tarde
y no resbalo.
Mi locura se resiste
a la caída.
Lábil línea roja
en la cabeza.
De las redes vuelven
saltos
y un trapecio en la garganta
pierde
gravedad.
Silvia Rodríguez Ares
8/8/2011
¡Hola, amigos! Soy Silvia Rodríguez Ares. Los invito a entrar en mi mundo de poesía. Bienvenidos.
la tarde
y no resbalo.
Mi locura se resiste
a la caída.
Lábil línea roja
en la cabeza.
De las redes vuelven
saltos
y un trapecio en la garganta
pierde
gravedad.
Silvia Rodríguez Ares
8/8/2011
el Universo
abre el hueco donde
brilla el fondo
para el ojo que se
apaga al nombrar
Silvia Rodríguez Ares
9/8/2011
que cada nombre
suelta
un misterio
entre las cifras
y la mano iluminada
por la voz
dorso de otra sombra
es la palabra clave
que se oculta
dejo que las letras
rueden
y me expliquen
lo que falta.
Silvia Rodríguez Ares
8/8/2011
duele el círculo
de baba ensangrentada
cuando el lobo nos aúlla
en los oídos
y ya es hora de dormir.
Silvia Rodríguez Ares
7/8/2011
disfruta del veneno
a solas
vive poco
la palabra y casi nunca
salva
Silvia Rodríguez Ares
6/8/2011
en que los pájaros
cruzaron la frontera
y olvidaron su plumaje
entre las dunas.
Fueron siglos lentos
de reptar en el exilio.
(Comprendieron cuánto tarda el aire
en derribar el muro.)
Silvia Rodríguez Ares
3/8/2011
el aire
su pudor
al borde
de la cama
exhausta
se lamenta
el fuego
la derrite
y no poder
volar
Silvia Rodríguez Ares
2/8/2011
Arden
las raíces
-resplandece la memoria-
Junto al cuerpo
se disuelve
la madera de mi hogar
Condenso en una mano
el humo
que me puebla
Silvia Rodríguez Ares
2/8/2011
en el portal
se ha detenido
El norte
alarga su mensaje
al viento
Los brazos
de la tierra
sueltan hojas blancas
(El círculo
se escribe
con su luz)
Silvia Rodríguez Ares
2/8/2011
su corazón de medianoche.
Alejandra Pizarnik
Concluye mi jardín
su palinodia
a oscuras
Otra era
de plantar visiones
se avecina
Se abre el surco
donde el páramo
florece
Silvia Rodríguez Ares
2/8/2011
por los pasos
de la hierba
el ocre peregrina
en la inquietud
de algún murmullo
celeste es la mirada
de los pájaros
que pierdo
Silvia Rodríguez Ares
27/7/2011
de mis huesos
impulso fragmentado
que despierta hacia la nada
la fuerza
con que arrastro los pies
Silvia Rodríguez Ares
26/7/2011
Cae la mano
dentro de la propia sombra
Poseer el lado oscuro
de uno mismo
Sopesar la transparencia
de los otros
Intentar un equilibrio
alargando el bastón.
Silvia Rodríguez Ares
25/7/2011
El ojo estira el borde
de la piel hacia adelante
Tras los pasos las gaviotas
vuelven picoteando
lo que queda de nosotros
(la verdad)
Silvia Rodríguez Ares
24/7/2011
del silencio
manos libres
de la lengua
domestican soles
la garganta se ilumina
en el vacío
de la jaula
(todo es luz
y no poder nombrar)
Silvia Rodríguez Ares
22/7/2011
Cuando el Arca prometía soles
construyeron lámparas de heno.
Remaron con fuerza
en sus violines de humo,
remontaron la corriente
(tras la piel)
y en otra orilla
se buscaron.
Las miradas extinguieron
el diluvio.
Silvia Rodríguez Ares
21/7/2011
a merodear la escarcha.
Dos luceros en la fuente
cristalizan los temblores.
Se agudiza el canto azul
de las alondras de humo.
Un cuchillo precipita
el grito en la negrura.
Quiero huir con estas manos
que lastiman las puertas.
Silvia Rodríguez Ares
19/7/2011
en el invierno de las sombras.
Alguien va juntando peces
en el río
y tres monedas para un viaje a las estrellas
demasiado corto.
Pasa el viento
en un cortejo de olas.
Luces peregrinas
desvanecen un ciprés nevado.
Llueve sangre de la tierra abierta
que sepulta cada flor.
Silvia Rodríguez Ares
18/7/2011
Devenires mutilados
se congregan en la mano
que no borra.
Yuxtaponen grietas
al dolor
las sensaciones rancias.
Hoy la náusea esplende.
Caminar es un suplicio
de kilómetros de ortigas
que instauraron su verdad.
Silvia Rodríguez Ares
18/7/2011
la acrobacia es infinita
tanto cielo pierdo en cada vuelo
que me quedaría inmóvil
desde abajo aplauden
mi osadía y el suspenso
(no comprenden la simpleza
de mi salto -inmortal-)
Silvia Rodríguez Ares
17/7/2011 (nueva versión corregida)
estas hojas secas que inaugura
el viento
a lo largo de la calle
caen las nuevas formas
de mirar
el humo dispersa
la humedad de cada gesto
(me pregunto si
la piedra aplasta lo que sueña)
Silvia Rodríguez Ares
16/7/2011