en un combate contra el viento
A metros de la lluvia
hay una espada que murmura
La tierra se alimenta
de crepúsculos diezmados
Un millón de flores
se sostienen con palabras
S. R. Ares
7/10/2011
¡Hola, amigos! Soy Silvia Rodríguez Ares. Los invito a entrar en mi mundo de poesía. Bienvenidos.
en un combate contra el viento
A metros de la lluvia
hay una espada que murmura
La tierra se alimenta
de crepúsculos diezmados
Un millón de flores
se sostienen con palabras
S. R. Ares
7/10/2011
en la curva del deseo
Centinelas amarillos
en trapecios cortos
Viento al norte
agazapado
Hilos de la luna
en el ritual
Silvia Rodríguez Ares
5/10/2011
de la sombra por las piedras
¿En la tierra quién no se reclina
cuando llega el tiempo de esperar la noche?
Duerme el cielo y las antorchas bajan
a soñar la luz
Silvia Rodríguez Ares
5/10/2011
de mi piel abierta
¿Cuál será el inicio
del dolor?
¿En qué lugar impacta
la vorágine de estrellas?
En mi frente oscilan
luces tenues
A lo lejos
se suicida otro cometa
Silvia Rodríguez Ares
29/9/2011
está pendiente
el brazo
(tanto erguirse sin raíz
con pretensiones vanas
de quitarle gravedad
al hecho de caer)
El suspenso
que demora el golpe
es quien sostiene
los ladrillos
Silvia Rodríguez Ares
28/9/2011
los ocasos
los deseos que me muerden
la palabra
Todo cuanto quise
fue un rumor
un animal rabioso
El punto de equilibrio
en la mortaja o la
semilla
Mis huesos en la tierra
hieden
vuelven a nacer
Silvia Rodríguez Ares
27/9/2011
transfigurada en otra
flor ausente
-Vuela
mariposa miope
entre mis dedos-
Refulge
un paraíso
de ceniza y humo
El ángel
se oscurece en el umbral
de los jardines
(como si inhalara
gris
o eternidad)
Silvia Rodríguez Ares
25/9/2011
veo pasar el viento
en naves que atraviesan
los confines de mis ojos
ninguna se detiene
a preguntarme
si aún espero o si
ya es tiempo de embarcar
Silvia Rodríguez Ares
17/9/2011
siento el dorso de tu mano
Soy este reflejo descendente
que acaricia las baldosas
En la calle sigo el rumbo
de las aves
Un nido de silencios
abre puertas solitarias
(Cuando miro el horizonte
vuelvo a entrar)
Silvia Rodríguez Ares
16/9/2011
la canción
al ritmo puro del enigma
que origina el viento
y hacia el mar se va la tarde
-en mis oídos-
para hundirse en otra noche
que naufraga
con la luz de mis pupilas
retrocedo
y voy juntando perlas
en orillas de sal
Silvia Rodríguez Ares
14/9/2011
-en este azul-
mi rezo
Al abrir sus plumas
tiembla al sol
un ángel
(Quién pudiera huir
cuando es preciso
amar)
Silvia Rodríguez Ares
13/9/2011
toca el fondo del misterio
giran en la noche
cuerpos transparentes
(casi es luna nueva)
el jugador
prueba su suerte en el billar
Silvia Rodríguez Ares
11/9/2011
en la antesala de la noche?
¿qué huella marca el rumbo
del latido errante?
cada vez hay menos tiempo
para ver el modo de seguir los pasos
de la luna pende un hilo
que gotea pistas falsas en la niebla
(el destino de los ciegos es caer)
Silvia Rodríguez Ares
9/9/2011
en mentes decimales
desintegra el viento vespertino
la ecuación ramificada
en la zona de silencio en que me muevo
caen las hojas
Silvia Rodríguez Ares
7/9/2011
su señal
en la intemperie de los dioses
Nadie
volverá a nombrar la cifra
que conecta el sur y el norte
Dispersiones óseas y
vibrantes formas del ocaso
son los guías de la nave
Por los mares sueltos
vamos diluyendo poco a poco
la canción
Silvia Rodríguez Ares
6/9/2011
cubrirá la cara
y el aroma rancio
dónde mostrará su trayectoria
en qué lugar del hueso
afincará la mano
este dolor
Silvia Rodríguez Ares
5/9/2011
en las ramas
aliso el bosque
con tapiz de mansedumbre
el sol blanquea
-en el ojo- manchas verdes
(y ya no siento que volar
sin jaula sea un destino peligroso)
Silvia Rodríguez Ares
4/9/2011
contemplar no es fácil.
La cabeza
es demasiado grande y
pesan tanto las razones
que los párpados
se obturan.
Cuesta un poco
abrir los ojos en el viento
y distinguir
-entre las nubes-
la serpiente.
Silvia Rodríguez Ares
3/9/2011
al iniciar el alba su canción
muere la belleza en brazos
de este sol que quema
los cimientos mudos de la tarde.
Dicen que la primavera clama por
justicia en otro cielo
cientos de candelas brotan sobre el
suelo profanado
(a la espera de un dios).
Silvia Rodríguez Ares
1/9/2011
es una sombra?
¿O tal vez sea el sol
el que diluye
los latidos de la sangre?
Ando a oscuras
en mitad
de los infiernos.
Es muy tibio el brazo
que me oprime
la garganta.
(Y ni siquiera
tengo ganas de gritar.)
Silvia Rodríguez Ares
30/8/2011